Preguntas para hacer a tu geriatra
Seguramente en algún momento te has identificado con esta situación: Ya sea por pena, por tener el tiempo encima o incluso creer que resulta insignificante el paciente suele salir de consulta con muchas dudas o bien estas surgen días posteriores a un nuevo tratamiento .
Lo que no sabes es que esa duda o inquietud podría ocasionar que suspendas tu tratamiento, tengas mal apego o incluso puedas estar realizando intencionalmente acciones que no favorezcan a tu salud o tratamiento.
Por lo anterior, en tu próxima consulta con tu médico geriatra te recomendamos que realices previamente una lista de todas las dudas que te han surgido desde tu última consulta, procura anotarlas comenzando desde la más importante.
Recuerda, no siempre tu médico podrá resolver todas tus dudas pero estamos seguros que hará todo lo posible por dar respuesta a las más importantes.
¡Sé paciente!
Una vez tengas dicha lista, no te olvides mostrarla a tu médico o tenerla a la mano, incluso aprovechar para anotar nuevas indicaciones.
Ahora bien, aquí te compartimos una propuesta de preguntas, puedes elegir la que más de adapte a tu situación actual:
- ¿Qué efectos adversos podría estar experimentando al iniciar el nuevo tratamiento o ajuste farmacológico?
- En caso de experimentar síntomas adversos, ¿Cuándo debo suspender el tratamiento?
- ¿Cuáles son los signos y síntomas de alerta a los que debo prestar atención en caso de una complicación?
- ¿Qué alimentos no me recomienda ingerir antes o después de tomarme el medicamento?
- ¿Cada cuando me recomienda realizarme un nuevo estudio o prueba?
- En caso de que el médico te expida una receta a mano, corrobora frente a tu médico las instrucciones o el nombre de los medicamentos que contengan dicha receta.
- ¿Qué sucede si llego a suspender por X motivo el tratamiento farmacológico?
- En caso de no lograr adquirir el medicamento que prescribió ¿podría reemplazarlo por alguno otro?
- En caso que planees un viaje en los próximos días o semanas, pregunta qué recomendaciones puede brindarte, si tiene algún colega de confianza cercano a tu destino que pueda atenderte ante cualquier emergencia e incluso si autoriza tu viaje en caso de que tengas un diagnóstico relevante.
No olvides que cuidar de tu salud se trata también de trabajo en equipo, confianza y comunicación.
Elaborado por Jazmín Camacho | Gerontóloga
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