viernes, abril 26, 2024
Salud

Alteraciones y lesiones asociadas al envejecimiento

El envejecimiento normal de la cavidad bucal no debe considerarse como sinónimo de enfermedad. Sin embargo, debido a que la homeostasis se encuentra disminuida en los adultos mayores con relación a individuos más jóvenes, las acciones encaminadas a preservar la salud bucal, buscan evitar su deterioro.

El proceso de envejecimiento produce en la boca una serie de cambios progresivos, irreversibles y acumulativos, haciéndola susceptible a agentes traumáticos e infecciosos
A continuación se describen las alteraciones y lesiones que frecuentemente se encuentran en la etapa de la vejez.

EDENTULISMO

Puede ser parcial o total y se define como la pérdida de uno, varios o todos los órganos dentarios. Se presenta aproximadamente en el 90% de los adultos mayores. Entre sus causas principales se encuentran la caries dental y la enfermedad periodontal.

ENFERMEDAD PERIODONTAL

Muchos adultos mayores padecen la enfermedad de las encías, o periodontal, causada por las bacterias de la placa, que irritan las encías y hacen que se hinchen, enrojezcan y sangren con facilidad.

XEROSTOMIA

El término se refiere a la sensación de sequedad que nota la persona debido a la disminución del flujo salivar. Es la percepción de sequedad en la boca, una condición clínica subjetiva donde hay menos cantidad de saliva de lo normal. Las manifestaciones clínicas que acompañan a la xerostomía suelen ser: sequedad, ardor y dolor de la mucosa bucal con pérdida de su brillo natural, disminución en su coloración y adelgazamiento de la misma, La lengua aparece atrófica y depapilada. Los labios presentan un aspecto reseco, con descamación y fisuras.

OTRAS ALTERACIONES COMÚNES:

*Caries dental.
* Cáncer de boca.
* Queilitis angular.
* Úlceras traumáticas

Fuente:
CENAPRECE (2010). Odontogeriatria. Guia de consulta para el médico del primer nivel de atención.
Champonois, P. (2018). Xerostomía bucal en adultos mayores y su relación con el consumo de líquidos y fármacos. Rev. Arg. de Gerontología y Geriatría;Vol 32(2):68-77