lunes, septiembre 29, 2025
Salud y prevención

Frases que jamás debes decirle a alguien con Alzheimer (y qué decir en su lugar)

La comunicación es mucho más que palabras. En el caso del Alzheimer y otras demencias, cómo hablamos puede aliviar o empeorar el día a día de la persona que vive con la enfermedad.

Una frase mal dicha puede generar ansiedad, enojo, frustración o tristeza, mientras que una comunicación empática y asertiva puede dar calma, seguridad y conexión.

Sabemos que cada persona con Alzheimer atraviesa la enfermedad de manera distinta, y lo que funciona en un caso puede no funcionar en otro. Los ejemplos que compartimos aquí son guías, no recetas universales. La clave es adaptar lo que leas a tu situación real, con paciencia y creatividad.

Quizá nunca hayas usado estas frases, o tal vez nunca te enfrentes a un escenario así, pero leer este blog es ya un gran paso para cuidar mejor, comunicar mejor y acompañar mejor.

Lo que NO debes decir / ✅ Lo que puedes decir en su lugar

1

“¡Ya te lo dije mil veces!”
“No pasa nada, te lo vuelvo a contar.”


Tip práctico: en lugar de alzar la voz, acércate, haz contacto visual y acompaña tus palabras con un gesto amable (como tocar suavemente su mano). Repetir con calma transmite seguridad, no impaciencia.

2

❌ “¿No te acuerdas de mí?”
✅ “Soy tu hijo, Juan, vine a verte.”


Tip práctico: preséntate siempre con nombre y relación. Esto evita ponerlos en aprietos. Incluso puedes usar objetos o fotos como apoyo para reforzar la conexión.

3

❌ “Eso ya lo hiciste.”
✅ “Qué bien que lo intentaste, ¿quieres que lo hagamos juntos otra vez?”


Tip práctico: el error repetitivo no es terquedad, es la enfermedad. Invita a compartir la tarea sin corregir de manera dura; esto fomenta colaboración en lugar de frustración.

4

❌ “¿Por qué haces eso?”
✅ “Veo que estás inquieto, ¿quieres que caminemos un poco?”


Tip práctico: cambia la pregunta por una acción que canalice su energía. Muchas conductas repetitivas son una forma de expresar ansiedad.

5

❌ “Estás equivocado.”
✅ “Entiendo lo que dices. Mira, ¿qué te parece si lo hacemos de esta forma?”


Tip práctico: no entres en confrontación. Si la realidad de la persona es distinta, busca redirigir sin invalidar. Un tono conciliador evita discusiones innecesarias.

6

“Eso no pasó así.”
✅ “Recuerdo que algo parecido ocurrió, cuéntame más.”


Tip práctico: permite que su recuerdo, aunque no sea exacto, tenga un espacio. Lo importante no es corregir la versión, sino acompañar la emoción que trae.

7

“Ya te lavaste los dientes, ¿no ves?”
✅ “Vamos juntos al baño, te acompaño.”


Tip práctico: el acompañamiento físico es más eficaz que la explicación verbal. Guía suavemente con gestos y movimientos, en vez de dar órdenes.

8

❌ “No puedes hacerlo.”
✅ “¿Quieres que lo intentemos juntos?”


Tip práctico: fomenta la autonomía dentro de lo posible. Aunque el resultado no sea perfecto, la participación fortalece autoestima y evita sentimientos de inutilidad.

9

❌ “¡No grites!”
✅ “Estoy aquí contigo, háblame despacio.”


Tip práctico: las personas con Alzheimer pueden alzar la voz por miedo o confusión. Responder con calma y un contacto físico (tomar la mano, acariciar el hombro) ayuda a regular la emoción.

10

❌ “Ya te dije que esa persona murió.”
✅ “Cuéntame qué recuerdas de él/ella.”


Tip práctico: revivir la pérdida como si fuera nueva genera dolor. Mejor acompaña la emoción con validación y escucha. Usa fotos o música relacionada para dar confort.

11

❌ “Apúrate.”
✅ “Tómate tu tiempo, no hay prisa.”


Tip práctico: apresurar aumenta el estrés y los errores. Dale espacio suficiente, reduce distracciones y divide las tareas en pasos pequeños.

12

❌ “Eso es fácil.”
✅ “Sé que puede ser un poco complicado, vamos paso a paso.”


Tip práctico: lo “fácil” para ti puede ser abrumador para él/ella. Reconocer la dificultad legitima sus sentimientos y promueve confianza.

13

❌ “Ya te lo expliqué.”
✅ “Déjame mostrarte otra vez.”


Tip práctico: usa demostraciones visuales o guía física. Por ejemplo, colocar la cuchara en su mano y hacer juntos el movimiento, en lugar de repetir instrucciones verbales.

14

❌ “No tiene sentido lo que dices.”
✅ “Quiero entenderte, cuéntame más.”


🔑 Tip práctico: las frases confusas muchas veces expresan emociones más que ideas. Escuchar y validar puede calmar mucho más que intentar descifrar con lógica.

15

❌ “Compórtate.”
✅ “Vamos a estar cómodos, te ayudo.”


Tip práctico: evita la palabra “comportarse”, que suena como regaño infantil. Si la situación es difícil (agitación, nerviosismo), redirige con tacto: cambiar de ambiente, poner música tranquila o invitar a otra actividad.

Siéntate a su altura: nunca hables de pie mientras la persona está sentada, eso aumenta la sensación de desigualdad.

Usa frases cortas y claras, con una idea por vez.

Valida emociones más que hechos: muchas veces buscan comprensión, no precisión.

Apóyate en lo visual y lo táctil: gestos, objetos, fotos, música o rutinas son más efectivos que largos discursos.

Respira antes de responder: tu tono y calma contagian más que tus palabras.

 

El Alzheimer cambia la forma en que una persona entiende y procesa la información. Pero la dignidad y la necesidad de conexión permanecen intactas. Elegir las palabras correctas y acompañarlas de acciones empáticas puede transformar un momento de frustración en uno de calma y cercanía.

Hablar con alguien que vive con Alzheimer no es repetir menos, sino saber cómo repetir mejor.

Elaborado por Jazmín Camacho | Gerontóloga