lunes, octubre 14, 2024
Salud

Cómo cuidar la DIGNIDAD del enfermo con Alzheimer

Cómo cuidar la dignidad del enfermo con Alzheimer: 9 consejos prácticos.

La dignidad es un aspecto que, lamentablemente, muchas veces se pasa por alto en el cuidado de una persona con Alzheimer. Pensamos que ciertos comportamientos o decisiones son «por su bien», cuando en realidad podemos estar afectando profundamente su autoestima y respeto personal. Al perder la capacidad de tomar decisiones o realizar tareas cotidianas, los enfermos de Alzheimer dependen totalmente de los demás, y en nuestras manos está el poder de preservar su dignidad o, sin querer, restársela.

No se trata solo de brindarles atención física, sino de tratar a nuestros seres queridos como personas completas, con emociones, historias y derechos, incluso cuando su memoria falle. Este blog está diseñado para que, como cuidadores, familiares o amigos, aprendamos cómo mantener la dignidad de quienes padecen esta enfermedad. ¡Te invito a compartirlo! Cuidar la dignidad es tarea de todos los que rodean al paciente. 💜

La Asociación Alzheimer Monterrey ha compartido estos útiles consejos que te ayudarán a dar lo mejor de ti mientras cuidas a alguien con Alzheimer. ¡Veamos cómo podemos hacer una diferencia!

9 consejos para cuidar la dignidad de un enfermo con Alzheimer:

 

El tono lo es todo 🎶

El tono con el que hablas puede marcar la diferencia entre hacer sentir a la persona cómoda, regañada o avergonzada. Mantén siempre una actitud respetuosa, evitando caer en un tono infantil o condescendiente. ¡Recuerda! Ellos no son niños.

Ejemplo:

  • Incorrecto: «¡Ay, abuelo! ¡Ya te lo dije mil veces, no entiendes!»
  • Correcto: «No pasa nada, abuelo, te lo explico de nuevo con calma. Vamos a hacerlo juntos.»

Este cambio en el tono les hace sentir que sus emociones y pensamientos son valorados. Ellos pueden no entender todo, pero perciben el cariño detrás de las palabras.

Cuida el lenguaje 🗣️

A veces, sin darnos cuenta, usamos palabras que pueden hacer sentir mal a tu familiar o paciente. En lugar de términos que puedan hacerles sentir como si hubieran perdido su independencia, opta por palabras más neutras y respetuosas. ¡El lenguaje tiene poder!

Ejemplos:

  • Incorrecto: «Pásame tu pañal, te lo voy a cambiar.»
    Correcto: «Vamos a cambiar tu protector para que estés más cómodo/a.»
  • Incorrecto: «Aquí está tu babero para que no te ensucies.»
    Correcto: «Te pongo esta servilleta para que disfrutes la comida sin preocuparte por ensuciarte.»

Pequeños cambios en las palabras pueden hacer que una situación incómoda sea más digna y respetuosa.

Cómo decir las cosas cuenta 💬

Podemos decir lo mismo de muchas maneras, pero la forma en la que lo decimos puede afectar profundamente la autoestima del paciente.

Ejemplo:

  • Incorrecto: «Ya no puedes hacer nada solo, mejor salte de la cocina.»
    Correcto: «Tu sopa siempre fue la mejor, ¿me enseñas cómo hacerla mientras te relajas aquí sentadito/a?»

Con esta simple reestructuración, no solo evitamos que se sientan incapaces, sino que les damos la oportunidad de seguir siendo parte activa de la familia.

Haz preguntas simples ❓

Evita preguntas abiertas o que puedan generar frustración si no conocen la respuesta. Asegúrate de formular preguntas claras y sencillas para que se sientan más seguros.

Ejemplo:

  • Incorrecto: «Mamá, ¿sabes quién soy?»
    Correcto: «Mamá, soy tu hija Ana, ¿recuerdas lo mucho que disfrutamos de los paseos juntas?»
  • Incorrecto: «Pedro, cuéntale al Dr cuántos nietos tienes»
    Correcto: «Pedro, cuéntale al doctor sobre lo mucho que disfrutas de tus 4 nietos.»

De esta manera, evitamos la incomodidad de no saber qué responder y fomentamos la participación en la conversación.

Informa cada acción 📣

No importa en qué etapa de la enfermedad esté el paciente, siempre es fundamental comunicar lo que se va a hacer. Esto les ayuda a no sentirse sorprendidos ni invadidos.

Ejemplo:

  • «Voy a ponerte tu suéter para que no tengas frío, ¿te ayudo?»
  • «Vamos a cambiarte de ropa para que estés más cómodo/a.»
  • «Te paso a la silla para que vayamos a dar un paseo.»

Al hacerlo, le estás dando el control sobre su cuerpo y demostrando que respetas su autonomía, aunque necesite ayuda.

Mantén informados a otros 🔔

Informa a familiares, amigos e incluso a los vecinos sobre la situación del paciente. Esto es clave para evitar situaciones peligrosas o malentendidos.

Ejemplo:
Cuando los vecinos saben que tu ser querido tiene Alzheimer, estarán más atentos si ven algo inusual, como que se aleje solo de la casa. ¡La comunidad también juega un papel importante en el cuidado!

Respeta su pudor 🚪

Aunque el Alzheimer puede avanzar y afectar sus capacidades, los enfermos siguen teniendo pudor. Es importante proteger su privacidad, especialmente durante actividades como el baño o el cambio de ropa.

Ejemplo:

  • En las primeras etapas, puedes asistirlos simplemente dándoles lo que necesitan, como una toalla.
  • En etapas avanzadas, cúbreles el cuerpo con una toalla mientras los ayudas a cambiarse, y asegúrate de que nadie más entre en la habitación durante el baño.

¡Esto les hará sentir más seguros y respetados!

Relájate y ten paciencia 🧘‍♀️

Sabemos que puede ser difícil mantener la calma cuando el paciente repite las mismas cosas una y otra vez o cuando hay momentos de confusión. ¡Pero aquí está el truco! Tu tranquilidad se refleja en ellos.

Ejemplo:

  • En lugar de frustrarte cuando te piden lo mismo repetidamente, respóndeles con calma: «Sí, ya te lo traje, todo está bien.»
  • Si te sientes abrumado, respira profundamente antes de reaccionar. ¡Recuerda! Ellos perciben tu ansiedad y pueden volverse más inquietos si tú lo estás.

Nunca gritar ni maltratar 🚫

A pesar de las dificultades, nunca se debe gritar ni, mucho menos, golpear a un paciente con Alzheimer. Aunque no puedan expresarlo, sienten miedo, angustia y tristeza. Si sientes que no puedes más, pide ayuda.

Ejemplo:

  • Si estás abrumado, busca apoyo en familiares o profesionales, pero nunca optes por gritar o maltratar. Un toque suave, una sonrisa y palabras de cariño pueden calmar su ansiedad más rápido de lo que imaginas.

 

La regla de oro: ¡Trátalos como te gustaría que te trataran! 🙌

Cuando estés cuidando a alguien con Alzheimer, recuerda siempre ponerte en su lugar. Aunque no lo digan, tu ser querido siente el amor, el respeto y la paciencia que le das.

¡Compartamos esta información con quienes nos rodean! Es tarea de todos preservar la dignidad de quienes enfrentan esta enfermedad. 🌿💖

 

 

Elaborado por Jazmín Camacho | Gerontóloga